04 agosto 2010

Las vidas posibles de Mr Nobody

SPOILER*SPOILER
Argumento: “en el año 2092, en donde viajar al planeta Marte es algo de lo más corriente, Nemo Nobody (Jared Leto) nacido en el año 1975 es el último humano que morirá, pues se niega a ser inmortal a pesar de que los adelantos científicos ya lo permiten. Nemo irá relatando sus posibles vidas como si todas ellas se hubiesen dado”
El film del belga Jaco Van Dormael “Las vidas posibles de Mr Nobody” es completamente inconexo (se rumorea que el mismo Van Dormael en la presentación del film en Sitges, medio en broma, afirmó que se quedaría en la sala por no haber entendido ni él el final de su película, abandonándola, tras un 'I’ve got enough', a los 40 minutos) Su estructuración brilla por su ausencia (puro caos) y eso que el hombre le dedicó un montón de tiempo “el guión me ha llevado siete años. He trabajado todo los días de 10 a 15.30” sinceramente mejor que se hubiese dedicado a otra cosa… Tantos años y tantas horas le han dado para pretender abarcar muchos temas (el efecto mariposa, la multiplicidad de mundos paralelos, el Big Bang y Big Crunch…) pero, ya sabéis lo que se dice “quien mucho abarca, poco aprieta” La realidad es que Van Dormael nos regala dos horas de escenas sin pies ni cabeza que van formando un puzzle al que, y lo siento mucho, le faltan piezas.
La historia habla de la multiplicidad de universos paralelos. A cada decisión que tomamos se abre un nuevo universo y esto se repite de manera infinita. Lo contrario, el Big Crunch es una vuelta a la nada, a la eliminación de elecciones. Pero después y de un modo cíclico volverá el Big Bang con su respectiva creación de universos paralelos. Así Mr nobody (Nemo, ya anciano) relata muchas de sus posibles vidas como si de un contenedor de memoria gigante se tratase. Todas esas vidas giran en torno a tres mujeres (Anna, Elise y Jeanne) y al amor (lo que hace de este film presuntamente eclíptico, una obra plana y repetitiva)
A la primera mujer (Anna) se le dedica una hora de metraje, a las otras menos (de hecho Jeanne tan solo tiene diez minutos escasos) El final de la película es un completo despropósito, pues implica un único camino, Anna, con lo cual toda la teoría expuesta y con la que te han estado torturando dos horas y pico se queda en nada. Camino, por cierto, más que cantado pues, como he dicho, a esta relación le dedican gran parte de la película. Ahora bien podría, al menos, habernos contado una historia de amor hermosa, sin embargo la relación entre Anna y Nemo es tediosa, empalagosa, repetitiva y se acerca peligrosamente al plagio de “Los amantes del circulo polar”, el director te vende su relación como un amor absoluto, pero cualquier persona un poco versada en esto del amor, sabrá que solo era un capricho de adolescentes descubriendo el sexo. Imaginarles durante otros quince años sin conocer a otra persona y pensando continuamente el uno en el otro, me produce un ataque de risa por lo absurdo de la situación. Pero es que, qué se le va a hacer, este filme es absurdo a más no poder, pues Von Dormael juega con el espectador con mediocridad: Le da escenas visuales bellas(pero carentes de emoción y originalidad, y no tan novedosas o hermosas como se había adelantado por ahí. Por cierto, no se a vosotros pero a mí tanto videoclip disfrazado de auteur me cansa soberanamente), le da sabrosas teorías que desarrolla de modo superficial y burdo (para ejemplo todas las referentes al efecto mariposa), y plantea acciones y decisiones estáticas, absolutistas y poco realistas (que si tu hijo quiere irse contigo en tren y se le rompa una zapatilla, eso no va a ser problema ni motivo de Adiós definitivo)
¿Algo más por añadir? Sí, primero que es una ensalada de escenas/ideas de otros Films. Si nos fijamos veremos “el efecto mariposa”,”El curioso caso de Benjamin Button”, la reseñada “Los amantes del circulo polar”, “2046” (con escenas de un escritor que habla de un mundo futuro acompañado de una música elegante… Anda que no le queda al señor Van Dormael por llegar a transmitir la mitad de la mitad de lo que consigue Wong Kar Wai Wai con sus imágenes), e incluso tenemos referencias a un capitulo de Futurama (con los bloques de agua, en el caso de la serie hielo, que helicópteros tiran al mar) entre otras. Segundo no transmite nada, es vacía, con tanto cambio es imposible implicarte en nada. Y tercero, tengo la impresión de que Van Dormael ha sido pretencioso y al serlo no ha sabido subordinar los herramientas (imagen, música, etc ) al argumento.
La película tiene este rollito de “mira lo que soy capaz de hacer y quedaros locos”, algo más que esperable de un ególatra cultureta entendiendo el último término según la RAE: Persona pretendidamente culta. En definitiva: Insufrible.


Por no repetirme colgando cosas os dejo Aquí el trailer

PS: No he visto sus otros films, así que al referirme al director como "ególatra cultureta" hablo en cuanto a esta película jamás como un insulto personal o una opinión que englobe toda su obra.

1 comentario:

  1. Lo cierto es que no me llamaba la atención esta película, y a su director no le conozco... Es difícil ver una buena película hoy en día, muy difícil.
    El otro día me vi descargada en v.o the Karate Kid. Me gustó, está entretenida (no es un peliculón, desde luego, pero entretiene) Eso sí, recomiendo verla en V.O.

    Un besazo

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